Hoy os traigo una receta para endulzaros el puente: un bizcocho cuatro cuartos. Es rápido y sencillo, ideal para la hora de la merienda con un buen chocolate calentito mmmmmm
Lo he hecho según la receta del libro "500 pasteles", de Susannah Blake, editorial Blume. Este librito está genial porque de cada receta te pone cinco recetas más. En este caso, te explica como hacer, partiendo de esta receta, un cuatro cuartos de limón, de naranja, de cereza, de nueces y de chocolate. Si alguna está interesada, que me lo diga y os lo copio en la siguiente entrada del blog.
Os pongo la introducción que hace la autora al bizcocho porque me parece genial: " Es uno de los pasteles más sencillos y tradicionales que han endulzado la vida a diferentes generaciones. Originariamente se elaboraba con las mismas cantidades de mantequilla, azúcar, huevos y harina".
Ingredientes:
200 gr de mantequilla a temperatura ambiente
320 gr de azúcar
6 huevos
280 gr de harina con levadura incorporada
4 cucharadas de leche
1 cucharadita de esencia de vainilla
azúcar glass para decorar
Elaboración:
Precalentar el horno a 180º, engrasar un molde circular de 22 cm y forrar la base con papel de horno.
Batir la mantequilla y el azúcar hasta que la mezcla esté cremosa y blanquee y, a continuación, añadir los huevos, uno a uno sin dejar de batir. Tamizar la harina sobre la mezcla y remover hasta que esté todo bien mezclado. Incorporar, sin dejar de remover, la leche y la vainilla.
Con una cuchara, vertir la mezcla en el molde y alisar la superficie con el dorso de la cuchara. Hornear durante 1 hora o hasta que la mezcla suba, se dore y un pincho salga limpio al insertarlo en el centro. Deje enfriar el pastel en el molde durante unos minutos y, a continuación, volcarlo sobre una rejilla hasta que se enfríe por completo. Antes de servirlo, espolvorearlo con el azúcar glass.
Observaciones:
Os he copiado la receta tal cual aparece en el libro, pero como siempre, yo la adapto a mis gustos y a lo que tengo en la cocina. Como pensé en hacerlo en un minuto, no tenía la mantequilla a temperatura ambiente, así que sustituí la mantequilla por margarina y está también muy bueno.
Para variar, he quitado el aroma y he puesto azúcar avainillado, me parece que fueron 300 gr de azúcar normal y 20 gr del avainillado. Eso lo dejo a vuestro gusto!
Justamente, como no había planeado hacerlo, no me quedaba papel de hornear, así que lo encamisé con margarina y harina, y quedó perfecto. Además utilicé un molde desmontable por lo que todavía se facilitó más la labor al desmoldarlo.
Supongo que ya lo sabréis, pero ni se os ocurra abrir el horno hasta que haya pasado el tiempo indicado para la cocción. Es mejor bajar la temperatura o que se queme un poquito por arriba, que siempre se puede cortar y decorar para que no se note, a que se hunda el bizcocho como si se tratare de una bañera!!
Antes de que penséis que soy magnífica con el pulso al poner el azúcar (qué más quisiera), he utilizado una plantilla de Lidl. El año pasado las compré y van genial, como son de plástico, se mojan sin problemas. Vienen en una especie de sobre de cartón unas pocas, no recuerdo cuantas, pero ahora no las venden... si queréis os aviso cuando las vuelvan a sacar a la venta :-)
Espero que os guste la receta y que paséis un feliz puente!!
bessisssss
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